domingo, 19 de febrero de 2012

CAPITULOS QUE SE CIERRAN...


Hoy, tras casi 10 meses de la pérdida de Cásper, cierro ese vacío en mi vida. Pero es un cierre en falso, ahí quedan encerradas pero latentes todas mis penas, mis ansiedades, mis deseos, mis ganas por volver a tener a un perrito a mi lado.
La situación es clara, esto se acabó. Y no hay hermosas palabras para escribir una larga y emotiva entrada, no las hay porque esto es tan feo que no afloran en mis dedos ni un ápice de poesía.
Acabo de dejar de buscar por la red algo que me dé un poco de luz, busco algún artículo, alguna información científica que me diga que estoy perdiendo el juicio, que tengo trastornos emocionales y sociales, pero no encuentro nada... A lo mejor mi trastorno todavía no tiene nombre, ojalá lo tuviera, porque lo que ahora mismo desearía es dejar de llorar por ese animal que se fue y por el que no ha venido ni vendrá, y no encuentro la fórmula mágica.
Quizá una terapia conductista haga sus efecto, fuera estímulos, fuera imágenes, fuera pensar en lo que no se puede pensar...
Capítulo cerrado, latidos detrás de ese muro de hormigón.

2 comentarios:

Lego y Pulgón dijo...

No sé muy bien lo que veo cuando me asomo a lo que cuentas. Pero sí sé lo que yo he sentido. Por si te sirve:
http://legoypulgon.blogspot.com/2006/12/te-gusta-conducir.html
La música de fondo: http://youtu.be/9K5Q8QWEkVQ

Pastor dijo...

Sólo quiero decirte que te entiendo perfectamente. Los dos Cásper en un extremo del Universo y nosotros en el otro, sin posibilidad de hacer un río de lágrimas que nos vuelva a unir a ellos. Un besote enorme Paqui.